ENCANTADOS CON EL COPO PARTIDO

“Llevamos desde la primavera empleando este copo partido de Hampiðjan, y ha funcionado extremadamente bien para nosotros. La pesca sale viva y coleando al caerse en los pantanos donde se desangran de inmediato. La calidad de la pesca ha aumentado considerablemente y la producción en tierra nos indica que no hay diferencia de calidad entre nuestra pesca y la que descargan los palangreros”, comentó Höskuldur Bragason, Patrón del arrastrero de Bolungarvík, el Sirrý. El Sirrý está pescando con un copo partido de cuatro paneles sobre DynIce Quicklines de Hampiðjan. El aparejo de arrastre es un Gulltoppur, suministrado por el equipo de Hampiðjan en Ísafjörður, liderado por el fabricante maestro de redes y gerente, Snorri Sigurhjartarson. Desde hace muchos años se ha utilizado aparejos de arrastre de este tipo en los arrastreros de Westfjords y han funcionado muy bien.

El copo partido, suministrado al Sirrý, se fabrica con Magnet de color Amarillo de 6,2 mm, con malla de 155 mm. Las bolsas gemelas del copo miden nueve metros de largo, y según Höskuldur Bragason, es estupendo trabajar con ellos.



Selectividad mejorada
“Previamente, utilizábamos una bolsa sencilla, y huelga decir que al utilizar un copo partido, ejercemos menos presión sobre la pesca. Al aparejarlo a las Quicklines, nos aseguramos que las tensiones en el copo se distribuyan de manera más equilibrada al arrastrar el aparejo y las mallas se mantienen abiertas más efectivamente que lo acostumbrado con un copo partido convencional de dos paneles”, afirmó, añadiendo que con el número de mallas más o menos de la mitad de un copo estándar, se mejora la selectividad aún más.
“Somos conscientes de ésto en el sentido de que la gallineta que, de otra manera, pescamos como by-catch, esté excluida de manera mucho más efectiva. Las mallas en el copo partido están totalmente abiertas, así que existe mucho menos riesgo de que el bacalao esté dañado por la espinas de la gallineta”.

DynIce Quicklines resuelve el problema
Höskuldur Bragason comentó que en su experiencia, lo que es dañiño para la calidad del pescado, sobre todo en condiciones climáticas extremas, es cuando se atan los estrobos por alrededor del copo al arrastrar el aparejo. Quicklines resuelve este problema, ya que se atan bucles, fabricados del mismo material, a las Quicklines, y éstos se utilizan para subir el copo  a bordo. Con lo cual se reduce el riesgo de accidentes en cubierta puesto que los tripulantes solamente necesitan enganchar un gilson a los bucles, y apenas se necesita pisar la zona de arrastre.

La sonda del copo supera a los sensors del copo
“Casi Podemos decir que las sondas del copo están dejando obsoletos a los sensores del copo. Vemos exactamente cuánta pesca va pasando hacia los copos. Procuramos colocar los arrastres por alrededor de las instalaciones que tenemos a bordo. Hay espacio para siete toneladas de captura en el tanque de desangrado, y nos preocupamos de mantener todo dentro de los límites establecidos”, explicó, comentando que despejar el copo partido resulta más rápido y más fácil que con un copo estándar.

No podría ser más útil
Höskuldur Bragason hizo hincapié en la importancia de tener acceso a los tecnólogos de aparejos de pesca quienes están familiarizados con las condiciones en los Westfjords. “Snorri es un tipo excepcional. Siempre podemos hablar con él y con los demás del personal de Hampiðjan en Ísafjörður, y nos arreglan las cosas. Son muy útiles, y nosotros aprovechamos cada oportunidad, cuando estamos en tierra, para buscar soluciones con Snorri y su equipo”, comentó.